Ley de la causa y del efecto
Toda causa tiene su efecto, todo efecto tiene su causa
Aunque parezca un poco raro, nuestro universo se rige por unas leyes que deberíamos conocer todos si queremos disfrutar de todo lo bueno de la vida.
En mi primer libro ya hablé de esta ley tan importante para mí. Conocerla y saber aplicarla es fundamental para conseguir nuestras metas.
Un principio que todos deberíamos saber es que cualquier experiencia en la vida es un resultado y ese resultado es debido a las decisiones que hemos tomado previamente.
Este principio, o Ley de la causalidad o Ley de causa y efecto, dice que todo resultado obtenido en el presente es debido a las acciones del pasado, y que si quieres mejorar tu futuro, tendrás que tomar las acciones necesarias para que lo que quieras conseguir suceda.
Puede darse el caso de que no seas consciente de enlazar qué hechos te han llevado a ese resultado que has obtenido. Pero lo que sí queda claro es que no vivimos en un mundo mágico y que, como bien hemos dicho antes, cualquier resultado es debido a una serie de acciones, pensamientos o decisiones que hemos tomado con anterioridad.
Por ejemplo: Estamos pasando por un mal momento con nuestra pareja y no sabemos por qué, sin embargo, estoy convencido de que ese malestar es debido a una serie de sucesos que nos han llevado a ese resultado. O tienes poco dinero en el banco, o te levantas por las mañanas y sientes que la vida te pide más, o te llevas mal con determinada persona, o te has quedado sin amigos. La lista de cosas puede ser eterna.
Todo está creado por una causa. Realmente nada nace de la nada.
Todo lo que te sucede ahora, ha sido creado en el pasado y todo lo que estás creando en tu presente, será la causa de tu futuro.
En muchas ocasiones hablo con personas que no entienden lo que les está sucediendo, pero cuando hablamos un poco más nos damos cuenta del por qué de esa situación. Una vez comprendida empieza el proceso para solucionarla y conseguir así una oportunidad de mejorar su futuro.
Ten en cuenta:
- Acepta que no puedes cambiar esta ley y que vives bajo sus normas. Ceder a ella te evitará mucho sufrimiento y te traerá todo lo contrario.
- Ponla en práctica para favorecerte de sus muchos beneficios.
- Piensa qué cosas puedes hacer hoy que tu yo del futuro agradezca. Hazte la siguiente pregunta cada día: ¿Qué puedo hacer para estar mejor mañana?
Esta es tan solo una pequeña parte, solo es una idea de por dónde puedes empezar.
Siembra una semilla que tengas que regar día a día para comerte un fruto dentro de un tiempo no muy lejano. Pelea duro, lucha por lo que te mereces.
Cada día tienes una nueva oportunidad para empezar a hacer las cosas bien, sin embargo, solo tú puedes cambiar tu vida.
Sé que no es un camino fácil, no obstante es muy gratificante.
Aprovéchate de los muchos beneficios de esta ley y empieza a hacer cosas que te acerquen a la vida que deseas. Cada uno de tus actos te llevan a un lugar. Si estás haciendo lo mismo de siempre, no esperes nada nuevo.